jueves, 30 de diciembre de 2010

Guerras cambiarias, guerras de celos

ETA: Esta Entrada estaba en Viviendo a 24 cuadros x segundo, pero la moví porque rompía con la línea del blog, que es sólo cine y TV.


!Hola hijos del bongo celuloidal!


Espero que se encuentren muy bien y que las circunstancias los favorezcan.

Como ya saben tengo un trabajo maravilloso que me encanta y cuyo único defecto es situarse en la cuasi zona corporativa de la 'Ciudá de la Pejesperanza', y digo defecto porque el tráfico de ida  y vuelta es peor que los pucheros de las abuelas (pesados y llenos de cosas que no sabes de donde salieron).


Un día de tantos veníamos de regreso Ber aka. El Jefazo.  Gavs aka. La Rockstarsaza,  y su segura servilleta cuando en un momento de epifanía (de esos que sólo dan en el baño)  empezamos a platicar, oh la originalidad, del amor.  Peeeero como escribimos en un medio financiero y de acuerdo con nuestra mente amaestrada todo esta relacionado con los negocios, llegamos a la conclusión de que las relaciones son como las finanzas.


Llegue a la pasmosa conclusión de que como en la macroeconomía, el amor es un juego de estrategia.  Así es cinéfilos todos, las rlaciones son como la jodida guerra cambiaria que nos trae azorrillados a todos.


Los paralelismo son varios, constantesysonantes.


China es como la chica inadecuada que toda la vida tuvo una amiga súper populaaaar EU. Mientras que China era la nerdosa que se escondía debajo de las escaleras, con frenos, coletas y mochila de Sailor Moon, EU era la típica Queen B que se iba de antro todos los findes y tenía mil guapos tras ella.


Pero, oh fortuna, un día China se convirtió en una mujercita muy wapota con miles de pretendientes. Y algo vengativa pues ya no que la beyotch de EU se quedara con toda la carne. EU se dio cuenta y quiso reconquistar su posició hacerle notar al resto del mundo quien era el papas fritas. Por lo que ambas empezaron una competencia para atraer a más tarugos posible.


Otra manera de verlo es como si fueran pareja. Como en una guerra cambiaria, en las relaciones tendemos a depreciar nuestra moneda o talentos para atraer a las personas que nos gustan y que exporten nuestros productos (o huesitos). Dejamos que el otro crea que tiene el poder y cuando ya lo tenemos amarrado a la pata de la cama, zaz, controlamos nuestra moneda para evitar que suba y otros mercados se aprovechen de nuestr@ insignificant other, o mejor dicho, no dejamos que el dueño de nuestras quincenas vea la tele por miedo a que le guste la modelo de Coca Cola y nos deje.


Entonces operoquepasa, los 2 se agarran de palabras, hirientes y pasivo-agresivas para hacer que el otro cambie pero como tienen una relación codependiente ninguno hace nada para salirse de tan tóxico arreglo amoroso y esperan que el otro ceda. Y de cajón se llevan entre las patas a los demás países, erm, hijos.


Son la típica pareja que ya no quiere estar unida pero son incapaces de separarse. Sus amigos o potencias mundiales tratan de intervenir pero con poco éxito por temor a hacer enojar a alguno de los 2 y se quedan como el chinito 'no más milando'.


Ellos en un intento de reclamar su hombría lanzan promesas (o dólares) que no pueden respaldar al resto del mundo, y aunque sus amigos con mejores relaciones intentan solucionar el conflicto, ninguno hace caso. Ellas se portan como buena hembra herida: orgullosa y malvada.


Uff, que con estos enredos amorosos mejor me quedo con mi perro y mi cochinito (mi alcancía, no los Piigs), y veo películas.


¿Ya ven porque bebo?

Les dejo el post del El Jefazo: 'Cotiza el amor en el mercado de valores', en su blog suyo de el y la entrada de la Rockstarsaza: 'Invertir el corazón en mercados de riesgo'. 



Me despido recomendándoles 'Hetalia', una excelente serie japonesa que explica las relaciones entre los países. Alemania, Italia y Japón son los mejores amigos, EU siempre quiere comer hamburguesas y Rusia nunca se atreve a hacer nada porque siempre molesta a sus hermanitos Lituania y Eslovenia.



Chéquenlo!






March

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