En la puerta del sol como el año que fue...

Estas fechas vuelven masas sentimentaloides a las mentes otrora racionalistas y como que inundan al mundo en un espíritu de estupidificación muy interesante.

No me lo tomen a mal, no soy el Grinch. Amo estas fechas porque los seres humanos jugamos a ser hermanos y a portarnos bien. Las razones difieren claro, pero el sentimiento es el que importa.

Estaba pensando en hacer la dinámica del fuego nuevo, ya saben, esa donde en un papel apuntas todo lo malo y lo que no quieres  en tu vida y luego lo quemas. No es cosa esotérica (esta dinámica me la agencie en un retiro de teresianos), pero si que es un placebo espiritual.

Sé que mis problemas no van a desaparecer por quemarlos en un afiche, pero al menos me ayuda a empezar a solucionarlos. Dice el código Bushido que un hombre íntegro con la palabra que empeña inicia la acción de cumplir, es decir que la quemazón va a ser un empujoncito kármico.

Soy católica creyente pero tengo que confesar que me gustan esos  placebos espirituales de fin de año. Me pongo pantaletas rojas por aquello del amor, bra amarillo por el dinero, tengo mis velas de la Divina Providencia, una manzana el punto más alto de mi cuarto para absorber la mala vibra, una bolsa con semillas en la puerta de mi casa para que no falte la comida, monedas en cada esquina para que no falte el dinero, la foto de mis seres queridos con una estampita del Jesús Pescador para que los cuide, barrer la entrada de mi casa, salir con las maletas y con el perico a la calle para viajar mucho, atragantarme con las uvas…

Sé que no sirven, pero por si las moscas lo hago. Ya se necesito ser más constante con mi fe en Dios y no en banalidades.

En fin quiero compartirles algunos de mis propósitos de año nuevo:

• Curarme del mal de porkynson (o sea bajar de peso).
• Hacer mucho ejercicio.
• Dejar de fumar (este propósito ya es una tradición en mis listas)
• Ser más constante en mis blogs
• No madrear la pared (ahora traigo la mano vendada porque por un coraje en casa me puse a pegarle a la pared…)
• Tener independencia económica (que en mi caso también implica psicológica)
• Separarme de mi familia (mas x su bien que x el mío)
• No dejarme vencer

Digo tengo mas propósitos pero estos son los que todos los años están en mi lista.

One last wish, que siempre encuentren la fuerza para hacer un alto y cambiar de dirección, de mandarlo todo a la chingada y volver a nacer.

Feliz 2011 y que todos sus sueños se hagan realidad.

March

PD. “En la puerta del sol como el año que fue, otra vez el champagne y las uvas y el alquitrán de alfombra están…”